Peligros de la riqueza.
Y echando en torno una mirada, dice Jesús a sus discípulos: ¡Cuán difícilmente los que posean riquezas entrarán en el reino de Dios! Los discípulos se asombraban al oír estas palabras. Mas Jesús, tomando de nuevo la palabra les dice: Hijos, ¡cuán difícil es que los que tienen puesta su confianza en las riquezas entren en el reino de Dios! Más fácil es pasar un camello por el ojo de la aguja que entrar un rico en el reino de Dios.
San Marcos 10, 23-25.
Cuentos chinos. ¿Tú ves a los que se llaman seguidores de ese mito salir todos los días a la palestra denunciando la desigualdad y combatiendo la riqueza? Todo un maldito cuento para mantenerse los mismos y no hay solución.
ResponderEliminarJesús Sánchez.