
BURGOS, LEJANO CLAMOR DE CAMPANAS
De tus torres las cumbres afiladas
desperezadas suben hacia el cielo,
inmortal el silencio de su vuelo,
las horas las contemplan asombradas.
Inermes en su destino y calladas,
soberbia su altura lejos del suelo,
perdida luz del sueño en desvelo,
pobladas de sombras estremecidas.
En otro tiempo estas torres me vieron
despertar a su luz enardecida,
entre un clamor de campanas lejano.
Fueron otros que de ellas me apartaron,
de sus claridades de amanecida,
de nada sirve que me queje en vano.